Si tu alma tuviera un despertador, sería este libro.
¿Alguna vez te preguntaste qué harías si un ser ancestral decidiera adoptarte como su humano favorito? Cómo criar a una banshee como mascota no es un mero manual; es un viaje al corazón de lo invisible, escrito con la picardía del Río de la Plata y la sabiduría de los viejos druidas.
Como arcana e investigadora del mundo feérico y de las mancias, te mezclo mitología celta, técnicas chamánicas y un humor ácido que te hace decir "¡che, esto es posta!". Vas a aprender desde cómo purificar tu aura (spoiler: no alcanza con sahumar con palo santo) hasta interpretar los susurros de tu banshee como si fueran mensajes de WhatsApp del más allá.
¿Para quién es este libro?
Para los curiosos: Descubrís qué onda con esos "ruiditos" en casa que no son el gato.
Para los prácticos: Rituales con espejos de obsidiana y café de por medio (nada de ayunos extremos).
Para los valientes: Tips para que tu banshee no se mufe y te mande sueños traumáticos.
Si querés una relación posta con lo sobrenatural —sin curanderos como intermediarios ni apps de meditación—, este libro es tu boleto. Eso sí: después de leerlo, no te quejes si empezás a ver el miedo... como el mejor chisme de tu vida.
Advertencia: No apto para los que creen que las mascotas solo sirven para ronronearte o lambetearte.
Genre: BODY, MIND & SPIRIT / Ancient Mysteries & Controversial KnowledgeEstá recién publicado.
¿Te imaginás tener una mascota que, en vez de traerte la zapatilla mordida, te ayude a convertir tus miedos en alas? Te doy mi más cálida bienvenida al manual más fuerte que vas a leer en tu vida: Cómo criar a una banshee como mascota. Acá no hay chamuyo new age ni recetas mágicas de Instagram. Esto es cosa seria, pero con onda.
Las banshees no son esos bichos que ves en las pelis gritando como locas. ¡Para nada! Son entidades liminales, viejas conocidas de los celtas, que se alimentan de emociones densas y te devuelven claridad. Imaginate una terapeuta etérica con estilo gótico y poderes para predecir el futuro. Interesante, ¿no?
